Muchas veces cuando nos enfrentamos a situaciones difíciles, creemos que nos encontramos sólos y con nuestra propias fuerzas y conocimientos para enfrentarlos. Esto nos hace quedarnos congelados y esperar a que la situación nos sobrepase. Creemos que debe ser así ya que deberíamos haber estado mejor preparados, pero esto no tiene por qué ser así.
Empieza a dar clases particulares
En mi experiencia como profesora y madre he podido ayudar a niños y jóvenes a salir de atascos de este tipo. Hay muchas formas de enfrentar los retos y esto depende de nuestra cultura familiar y también de nuestra sociedad.
Una forma de ver el aprendizaje es como fijo. Se trata de pensar que nuestra inteligencia y habilidades son las que hemos traído desde el nacimiento y eso se demostrará en la vida. Incluso en escuelas de alto rendimiento se puede encontrar personas con esta concepción sobre el conocimiento que les impide exponerse al error y de esta manera se alejan de nuevas experiencias y de nuevos aprendizajes.
Tener un concepto fijo sobre el aprendizaje nos lleva al fracaso. Alguna vez la ciencia nos dijo que nuestra inteligencia y habilidades se quedan fijas después de un determinado momento de la infancia. Pero ahora se ha descubierto que esto no es así.
La científica de Standford Carol Dweck ha descubierto que existe otra forma de ver el aprendizaje que es asumirlo como progresivo. No venimos con habilidades innatas sino que las vamos desarrollando conforme nos entrenamos y familiarizamos con el tema a aprender, ya sea en música o deportes, idiomas, filosofía o matemáticas.
Todo implica práctica. Incluso teniendo un gran talento en algo, esto no despegará si no lo entrenamos. La práctica hace al maestro como reza el dicho y debemos hacerle caso. La concepción del aprendizaje como progresivo nos permite creer en nosotros mismos e invertir en nuestra práctica con humildad, fe e ilusión.
Por eso, cuando nos enfrentemos a retos en educación, no nos quedemos en la culpa y en la sensación de fracaso. Busquemos ayuda. Siempre hay una forma de mejorar. Siempre hay una práctica que funcionará para nosotros. No todos aprenden igual. Podemos creer que no hemos nacido para algo, pero esto sólo es una creencia, se trata de no haber estado expuesto al tema lo suficiente o de la manera correcta. Con la ayuda adecuada podemos rebatir esta situación y llegar a sentirnos seguros e incluso disfrutar del aprendizaje.
Por eso, desde acá aconsejo y recomiendo buscar ayuda con un profesor que comprenda nuestra situación personal, nuestras experiencias y dificultades. La educación implica aproximarse humanamente a otro ser humano y guiarlo con comprensión y amor. La tecnología puede ayudar, es una heramienta, pero no debemos olvidar que la educación es un asunto humano. Darle la mano a alguien que se encuentra en la oscuridad y guiarlo hacia la luz. Desde el inicio de la cultura nos hemos pasado esta posta y gracias a esta plataforma educativa podemos llegar a una diversidad de alumnos con diferentes necesidades. Sigamos haciéndolo.