Como estudiante universitario y como autodidacta en diversas áreas, así como trabajando de docente a la vez que estudiante de cursos de inglés, he podido notar que muchas veces los métodos de enseñanza no se ajustan a las necesidades e inquietudes del estudiante. No existe el diálogo, no hablo del intercambio verbal, sino el diálogo de intereses, así como tampoco existe una ruta trazada en un lenguaje que sirva al estudiante como un mapa y al que siempre se pueda acudir con confianza.

En eso consiste mi método: se trata de una ruta trazada, que desde el comienzo estará abordando inquietudes de distintos niveles: básico, intermedio y avanzado, de tal manera que el estudiante en el transcurso de su formación no se vea sorprendido por conocimientos no abordados por el nivel en que se encuentra. La experiencia viva de el lenguaje es simultánea y múltiple, por lo que incorporar un constante diálogo entre la linealidad del contenido por niveles y la simultaneidad del contenido en la expresión real es fundamental para mantener la atención del estudiante así como su satisfacción.

Así, por ejemplo, abordaremos desde el verbo "to be" -sí, el dichoso verbo con el que suelen abrirse la mayoría de cursos- hasta los condicionales (zero, firts, second and third), desde el comienzo y según sean las inquietudes del estudiante y su conocimiento previo. Abordaremos de forma continua las locuciones (phrasal verbs), hasta dinámicas con recursos didácticos en apps gratuitas, para garantizar un aprendizaje orgánico en nuestro viaje.