Las clases tienen por objetivo lograr que los alumnos sientan la seguridad que el curso no tiene la dificultad que hubieran podido imaginar y que la matemática es un curso que puede llegar a ser entretenido, útil, de uso constante y cuyos conocimientos dan ganas de compartir. Al final de cada clase, los alumnos salen con la certeza de haber aprendido algo nuevo y que el tiempo transcurrió de manera rápida. Siendo esta una materia de utilidad en todos los campos del conocimiento humano, es bueno que las personas desde temprana edad sientan que la matemática es un aliado para toda la vida. Desde el primer día, el alumnos sienten que el curso es su amigo y que el profesor es un amigo a su disposición en el mundo de la matemática. Cada vez que el alumno resuelve un ejercicio o problema matemático, refuerza su confianza, su seguridad y cambia su actitud hacia un curso que algunos no aprecian. Las clases de Matemática para alumnos de primaria, también primer y segundo año de secundaria dan la confianza en si mismos de los alumnos y les permite visualizar nuevas perspectivas profesionales desde su temprana edad. La confianza se manifiesta en los niños cuando se sienten respetados, comprendidos, alentados y acogidos en una situación de diálogo y respeto. La confianza es un valor muy importante en la educación de los niños que debe alimentarse constantemente con amabilidad, cordialidad y que mejor que dentro de un curso como la matemática que le plantea retos donde usará su mejor arma, su propia inteligencia.