He podido sacar mucho provecho a lo largo de mi experiencia docente con personas que por situaciones económicas o desinterés nunca pudieron acudir a una escuela de formación, que no saben siquiera leer o escribir, niños que por desmotivacion sobrepasan la edad necesaria para cursar cualquier grado y deben pasar a validar el bachillerato, adultos mayores con ganas de aprender, madres y padres cabeza de familia. Todos estos han sido retos de los cuales me siento enormemente agradecida, pues ayudar a avanzar a niños pequeños ayudar a dar sus primeros pasos aunque no es fácil es un poco mas llevadero pues los niños pequeños quieren aprender, absorben muy rápido la información y la gran mayoría siempre estan motivados, a diferencia de una persona que nunca en su vida ha sostenido un lápiz o cuaderno en su mano, que no sabian siquiera escribir su nombre o identificar algun números, adultos mayores que les cuesta recordar cosas, o niños que con el pasar de los años han ido perdiendo la motivación y el amor por estudiar y aprender y que día a día se convierten en un reto para las instituciones educativas. Toda esta experiencia me ha formado como persona, me impulsa a trabajar de forma personalizada con cualquier persona, analizar sus virtudes y defectos y utilizar todo a mi favor utilizando el mejor método acorde a todo tipo de personas. He aprendido sobre los métodos de aprendizaje y las formas de aprender de cada una de las personas que he tenido a mi cargo.